Jugar con las letras
El taller de poesía comienza hablando de poesía a modo de trabalenguas, jugando con las palabras, estirándolas, acercándolas, recitando palabras pequeñas y grandes, algunas muy difíciles, palabras bonitas y alguna que otra fea.
Hablamos también de los poetas y nombramos aquellos que conocemos (entre ellos, por supuesto, nuestra Gloria Fuertes). Para los más curiosos dejamos la tarea de investigar sobre otros poetas y sus obras (Eduardo se encargará de contarnos quién fue un tal Ramón Gómez de la Serna). Descubrimos que hay poetas que escriben como les da la gana y ¡hasta con faltas de ortografía! Juan Ramón Jiménez, por ejemplo, todo lo escribía con jota.
Después llega la hora de enfrentarnos al papel y dejar que las letras inunden la hoja, eso sí, libres como el pájaro de la poesía. Partimos de una pequeña poesía sobre la letra M y, tomándola de ejemplo, creamos las nuestras.
(A juego lento. Taller de poesía. Mar Benegas y Carlos Rubio. Editorial Litera, 2016)
La eMe es un caMello
con el que cruzar
un Mar de arena.
La J es el anzuelo del pescador
y en su casa
tiene un bonito jarrón.
(Lucas)
La P de Primark
es donde trabaja
mi papá.
(Pau)
La R es un ratón
que se le escapó
a Don Ramón.
(Pau)
La I de iglú es un sitio
donde los idiotas
pasan frío.
(Irene G.)
La L es el limón
que cada día cae del limonero
por diversión.
(Irene G.)
La n es un puente
por donde pasa la corriente
de toda la gente.
(Sebastian)
La B es un burrito
y está rico.
(Cristian)
A la L de leopardo
la cuida Gerardo.
(Eduardo)
La H es un helado
como el que me tomo
en primavera y verano.
(Mateo)
La B es brillante
como el sol.
(Alma)
Continuará...
Comentarios
Publicar un comentario